Nuestras vacaciones de Invierno, 2da parte...

Como se pudieron dar cuenta, en la primera parte de nuestras vacaciones, no tuvimos ni un minuto sin estar con nuestra gente querida, visitando o saliendo a lugares entretenidos con nuestra Monita.

Ya de regreso de Santiago, en esa "maratón de visitas", bajamos directo del avión a acostarnos a nuestra deliciosa cama (pucha que se extraña la camita de uno cuando uno anda de viaje, ¿no?).

Bueno, como la idea, era partir en la mañana rumbo a Arica, la ciudad más al Norte de Chile y que limita con Perú, nuestro destino final, hicimos una maleta más pequeña y partimos en nuestro auto. (Las maletas del otro viaje, no las quise ni mirar..., para no deprimirme jejeje).
 

 El viaje estuvo de maravillas, apreciando el hermoso Desierto de Atacama, con puros cerros sin nada, pero nada de vegetación.

Esto si que es desierto, no???

Luego, subimos 5 cuestas, con acantilados, que si un auto se cae, jamás lo encontrarían ..., por lo que fuimos ¡muy atentos!.

Justo cuando nos quedaba como media hora de camino, nos para un Carabinero (policía), que estaba escondido con su patrulla (auto policial), detrás de unas rocas el muy bandido... y nos pasa un fatal parte, por ir a exceso de velocidad, marcado por radar ... solo conducíamos a 123 k/h, el problema era que era zona de 100 ... Fue terrible, ya que nos dejaron citados al juzgado de Arica el 10 de agosto, para hablar con el juez, pagar la fatal multa y ver por cuantos meses le suspenderán la licencia de conducir a mi esposo ... (Bueno, ya tenemos todo programado para ir, la próxima semana, nuevamente a Arica, ahora solo ha hacer el desagradable trámite).

Después del desagradable "lapsus", que en realidad nos pilló demasiado por sorpresa, ya que luego de bajar las temibles cuestas a 75 k/h, nos encontramos con esa agradable recta traicionera ... (donde se escondían éstos ...).

Bueno, ya en Arica, no pudimos seguir directo a Tagna Perú, ya que nos recomendaron, hablar a primera hora con el juez al día siguiente.
Alojamos en un hermoso hotel, que a Monita le encantó, ya que tenía una casa de muñecas ... (nos costó un mundo sacarla de ahí     jejejeje...
Mas tarde, recorrimos la ciudad, conociendo lo más característico "El Morro de Arica".
Visitamos el museo del Morro, también y sacamos muchas fotos de noche.

Nos quedamos por las puras. Al día siguiente, el juez, vió el parte y no dejó hablar a mi esposo, dijo: "A NO, falta gravísima, no hay descuento!". Siguiente... Mi marido salió indignado, pero en fin las vacaciones no podían arruinarse por éste detalle.

Dejamos nuestro auto en casa de un conocido y partimos en Colectivo a Perú. La travesía duro a penas 1 hora y media, pasando por ambas fronteras y los típicos papeleos y revisiones. LLegando nos alojamos en un hotel recomendado y a recorrer se ha dicho.

En Tagna, existe nucho comercio y muy barato, ya que el cambio del peso chileno, a los soles peruanos, nos resulta super conveniente. Nos fuimos de compras toda la tarde y en la noche a cenar a un lindo Restorant de comida típica Peruana. ¡¡¡Delicioso!!!.

Justo en Perú estaban celebrando sus Fiestas Patrias, así es que vimos toda la ciudad decorada con sus banderas y colores rojo y blanco.
Al día siguiente, fuimos a conocer su plaza, su catedral y el centro antiguo de la ciudad. muy bello por lo demás. Seguimos conociendo y vitrineando.  

La catedral de Tagna, en la plaza central...

Y seguimos conociendo sus calles, su arquitectura y más y más comercio. Se nota que es una ciudad pequeña, pero gracias a su comercio, va creciendo rápidamente.

A la mañana del día siguiente, se nos terminaban las vacaciones y nos tomamos el último desayuno ...

Mas tarde,  regresamos a Arica y recuperando nuestro auto, decidimos pasar por el Museo de MOMIAS Chinchorro (dicen que las más antiguas del mundo). Era realmente expectacular!!!.

Museo Momias de Chinchorro...

Luego, nos tocó pasar por el fatídico camino ...  y las terribles cuestas, nuevamente...

Llegamos al anochecer del día domingo pasado y ver Iquique nos causó mucha alegría, sus luces y movimiento.

Llegamos felices, motivados, radiantes de energía.

En general fueron unas vacaciones super movidas, con poco descanso, pero que nos hicieron desconectarnos por completo de la rutina, por lo que sacamos puros resultados positivos ... y luego a desarmar maletas, la ropa, uffff ... ¡¡¡necesito vacaciones!!! jajaja.