Ya todas saben, lo pesado que ha resultado éste inicio de año para nuestra familia, entre regreso de vacaciones muy agitadas, cambio de casa muy flach... y una enfermedad increíble de mi esposo, que aún lo tiene hospitalizado en Santiago, lejos de nuestro hogar, ya por más de un mes. La Monita y yo, hemos estado entregadas a su cuidado y evolución, que gracias a Dios ha sido muy positiva y nos tiene muy cerca de volver a casa.
Tengo múltiples pensamientos en mi cabeza... dudas, preguntas, sensaciones y sentimientos...
Serán pruebas importantes que nos manda Dios, para hacernos meditar y valorar lo hermoso que tenemos y no apreciamos???.
Serán hechos fomentados por personas mal intencionadas que tienen energías negativas..., pero, si fuese así...¿por qué a nosotros???, en verdad no se..., no me lo explico.
Será simplemente el destino..., que nos hace darnos una oportunidad para cambiar desde lo más profundo... nuestra manera de ver la vida...
Lo que hemos aprendido ha sido mucho y bueno: sobre bondad, amistad, amor, compañerismo, agradecimiento y por sobre todo de unidad... Nuestra ¡UNIDAD COMO FAMILIA INQUEBRANTABLE!...
Nosotros con nuestra pequeña familia hemos salido FORTALECIDOS y tenemos la posibilidad de cambiar para ser mejores, amigos, padres, esposos, amantes de la naturaleza y de las cosas simples, lo simbólico, lo admirable, lo bello...
Aprendimos que cada día es único y debe vivirse con alegrías y no tanto inútil enojo... (verdad???).
Aprendimos a valorar nuestro AMOR INCONDICIONAL y A TODA PRUEBA. En verdad hemos salido campeones y ¡¡¡nada nos separará!!!.
Si Dios quiere (y va a querer), llegaremos en una semana a casa, a disfrutar de las cosas bellas que la vida nos entrega..., con una segunda vuelta:
A caminar a pies descalzos por la playa, en la mañana...
A respirar una y mil veces el aire salino y puro...
A abrazarnos y besarnos como nunca antes, ya que nunca más nos separaremos...
A reírnos más, incluso de nosotros mismos...
A trabajar lo justo, para estar más tiempo juntos...
A regocijarnos con lo bello que nos da Dios en el día a día...
En fin, veo todo lo sucedido, como una nueva oportunidad para enfocar la vida de la manera más positiva que se pueda, bloqueando todos los males y a las personas negativas, aunque cueste... Superar los errores y avanzar!.
Me siento inmensamente feliz, por que ya estamos a un paso de volver a vivir nuestras vidas y a sentir que todo fue un sueño...
Un sueño que fue tan real, como cada una de las lágrimas derramadas y el estrés diario de no saber como terminaría todo y de dejar todo lejos por y en post de la salud de mi esposo.
Hemos salido vencedores y recuperaremos nuestra libertad de vivir y disfrutar al máximo,,, "CARPE DIEM"!!!
No busques un por qué. La vida a veces nos da estas sorpresas, nos pone estas duras pruebas. Lo importante, como dices, es salir fortalecidos, ser fuertes, y valorar doblemente lo que somos, lo que tenemos y lo que conseguimos con nuestro esfuerzo.
ResponderEliminarMe alegro muchísimo de que la evolución de tu marido. Espero que pronto estéis en casa y como bien dices, disfrutéis de los pequeños momentos y de vuestra familia.
Un beso enorme!!
Me alegro mucho de que lo veas con ese positivismo Paula, porque precisamente así es como se avanza y se aprenden lecciones. Ha sido espantoso, si, pero habéis aprendido lecciones valiosísimas, salís reforzados como familia y estoy segura de que tu has descubierto que eres más fuerte de lo que tu misma pensabas. Me alegro guapa, espero que tu marido salga pronto de la clínica y esteis los 3 en casa. Besos!
ResponderEliminarQue buena noticia!! Pronto estareis en casa, con vuestras rutinas, en vuestro lugar familiar... que ganas teneis que tener!!!
ResponderEliminarLo importante de todo esto vivido es lo bien que habeis salido juntos, y lo fortalecidos que estais ahora como pareja y como familia... aprovecha todo el aprendizaje de esta lección...
Pauli, me gusta leerte tan positiva. Ojalá que estos días se hagan cortos y puedan estar pronto en casa.
ResponderEliminarFalta muy poco, pucha paciencia, energía y fuerza.
Cuidate, no andes con mucha prisas (dentro de lo posible), que tienes que estar bien, hay una Monita maravillosa y un papá mono que quieren amarte por mucho tiempo.
Saludos y abrazos.
Trax:
ResponderEliminarMe resulta inevitable comenzar a busar razones, pero en verdad se que nunca las comprenderé.
Lo que pasó, pasó y ahora solo nos queda tirar para adelante, pero más felices que antes, porque hemos sobrellevado situaciones límites...
Gracias por acompañarme en éste difícil período y algo monotemático!.
Mil besitos y abrazos!
Drew:
Gracias guapa!.
En verdad creo que me he dado cuenta de lo fuerte que soy, sin embargo se que me puede venir un bajón...
De aprendizajes..., muchos... Espero que como familia podamos llevarlos a cabo y que no se pierdan en el tiempo, sería una lástima.
Un abrazo apretado!!!
Irene:
ResponderEliminarClaro que intentaremos aprovechar todas éstas lecciones de vida!.
En verdad, no imaginas cuanto ansiamos volver a casa, que fue literalmente abandonada..., al igual que nuestras rutinas.
Creo que será maravilloso volver, aterrizar en nuestra ciudad y abrir nuestra puerta, con otras ideas en la cabeza... Ideas renovadas, repletas de positivismo!.
Un gran abrazo para ti también!
Pamelita:
Mi gran amiga, gracias por tu gran apoyo, durante éste interminable mes y días...
Ya queda menos y pronto volveré a ser como antes, pero un poquito mejor (eso espero...).
La Monita necesita comenzar su colegio, retomar sus aprendizajes y amistades y nosotros como familia, volver a sentirnos plenos, descansados y felices.
Mil abrazos!
Espero que por fin estén disfrutando de esa paz tan deseada. Cuando ocurren cosas así, momentos clave que nos hacen replantearnos todo solemos volver a redirigirnos y disfrutar realmente de la vida. Besos
ResponderEliminarNo hay un por qué. Sólo hay que recordar lo que has aprendido de la experiencia.
ResponderEliminarUn beso valiente!