Tiempos super movidos...

         Comienzo disculpandome por estar tan alejada de las lecturas de sus blogs (si querer hacerlo sñif...!), ya que estamos con visitas (de nuevo) jejeje, de la ciudad de mi marido, Viña del Mar. Su primo, esposa y dos pequeños, uno de 7 y otra de 4 añitos, han sido las fieles compañías de la Monita, durante estos ultimos días y hasta mañana, por lo que ella está muy feliz y alucinada...     

         Nos la hemos pasado en la playa, disfrutando del sol, el mar, bellos parajes y la brisa marina, para luego trasnochar, cenando algo rico y conversando de lo lindo (aunque tanto salirse de la rutina, me tiene muy agotada y extrañando...).

         El día viernes fue genial. Conseguí que la niña que me ayuda con las labores de la casa, se quedara con los tres niños y pudimos salir las dos parejas, a disfrutar de una noche  bien entretenida.

        Fuimos a cenar a un exquisito restaurante y luego, nos fuimos al casino de Iquique. Nos tomamos unas cositas... y disfrutamos de charlas que salen de lo común, haciendo mil recuerdos... y escuchando buena música.

        Como nunca, llegamos a casa pasaditas las 4 y media de la mañana...

       Parece insólito, pero es cierto...

       Desde que nació nuestra hija, hemos tenido muy pocas oportunidades de salir solos, ya que somos muy aprehensivos y no tenemos a alguien que se quede con ella, cuidandola. Cuando viviamos en Santiago, en muy pocas ocasiones, le pedimos a mi mamá que se quedase con ella, pero casi nunca de noche. Por otra parte, cuando hemos tenido que ir a una fiesta de matrimonio, se ha quedado mi suegra, que venía especiamente desde su ciudad, hasta nuestra casa.

       Si bien es cierto, desde que nació la Monita, hemos seguido compartiendo con otras parejas, pero siempre es con nuestros niños y en las casas, disfrutando de asaditos, fiestas familiares o cenas varias. Los niños y los adultos lo pasamos fantástico y disfrutamos en familia.

       Creo que es importante y saludable tambien, salir con la pareja en otras instancias y de esta manera dejar lo cotidiano y hacer cosas entretenidas, que permiten revivir la magia, que se va apagando con el paso de los años.

       Espero estar a mitad de semana, retomando nuestra rutina, terminando con los preparativos de la fiesta de Fin de año, del Jardín de mi hija y con todo lo Navideño. Ya les contaré, ya que además, pasadas las fiestas, saldremos de vacaciones y ni tiempo he tenido para preparar todo como corresponde.,. ufffff, se nos viene más trabajo   jajaja.

                                             ¡Un gran abrazo!